A sus 33 años, Huskić aporta una dilatada experiencia tanto en el baloncesto español como en ligas internacionales. Inició su andadura en España con el Delteco GBC, equipo con el que debutó en la ACB. Posteriormente, bajó a LEB Oro para vestir la camiseta del Huesca, antes de recalar en el San Pablo Burgos, donde fue una pieza clave en el ascenso a la máxima categoría, permaneciendo cuatro temporadas más en el club. Más tarde, defendió los colores del Retabet Bilbao en la temporada 2020-21, y luego dio el salto al baloncesto europeo con el Syntainics MBC alemán y el Jonavos CBet lituano.

Hace dos campañas regresó a España para apostar por el proyecto del Leyma Coruña, culminado con el ascenso a la ACB. Ahora, en Santiago, contará con varios conocidos de estos últimos años, lo que, sin duda, le facilitará su adaptación tanto a la ciudad como al estilo de juego que propone Epi.

En la pasada temporada en la Liga Endesa, Huskić promedió 7,3 puntos, 5,1 rebotes y 2,8 asistencias por encuentro. Un año antes, en Primera FEB, sus cifras fueron aún más destacadas: 11,1 puntos, 5,8 rebotes y 3,7 asistencias por partido.

Para el entrenador del Monbus Obradoiro, quien ya coincidió con Huskić en el vestuario de A Coruña y Burgos, aportará mucha experiencia ya que es “conocedor de la categoría. Destaca por su capacidad de generar puntos tanto en continuaciones como desde el poste bajo y poste alto. Gran visión de juego acompañada de una gran capacidad de pase. Nos ofrecerá la posibilidad de jugar con otros registros ofensivamente que no sea sólo el uso del bloqueo directo. Además, tiene capacidad de sumar en el rebote en los 2 aros”.